miércoles, 17 de octubre de 2007

una meditación

FRAGMENTOS DE UN DIARIO DEL HOMBRE

(…)
(…) El pensamiento filosófico es vacilación continua, sumamente sorda, aun cuando tiene las pomposas seguridades dogmáticas. Incluso cuando avanza, se repliega hacia sí. Se le cree uno y él se rompe. ¿No habría que demarcar para el filósofo la definición barresiana del poeta: será el filósofo “un alienado que hace alienados”? En efecto, si yo me observo, “yo es otro”. La duplicación del pensamiento es automáticamente desdoblamiento del ser. En la penumbra, la conciencia de estar solo siempre es la nostalgia de ser dos.
Heme aquí como materia de duda, como materia de dualidad que fermenta, pesada y ligera según se enriquezca o se evapore, según corra o huya. En mí meditando –dicha y estupor- el universo viene a contradecirse. Es materia firme y engañosa. En mí, el universo entero viene a aislarse, viene a enloquecer hasta creerse un solo pensamiento.
(…) Basta con meditar el tiempo suficiente una idea fantástica para ver al universo realizarla. Sin duda el esbozo puede ser frágil. Basta una ruptura de soledad para romperlo. Pero, en sueños más regulares, la soledad es un mundo, la decoración inmensa de todo el pasado nuestro. (…) El menor objeto contemplado nos aísla y nos multiplica. Ante muchos objetos, el ser que sueña siente su soledad. Ante un solo objeto, el sujeto que sueña siente su multiplicidad.
(…) En cuanto un alma se encierra bien en su soledad, toda impresión es oportunidad de un universo. (…)

Gaston Bachelard (en El Derecho de Soñar)

4 comentarios:

Axolott dijo...

Creo que has descubierto otro sentido al mismo sentido que el corto quizo expresar, el desdoblamiento del ser es algo fascinante y oculto.

Muy bueno tu aporte!

d dijo...

avanzar por el camino de la incertidumbre en busca de las aguas de la certeza. subir escaleras que llevan a destinos perecederos, que cuando los alcanzamos tenemos que tirar la escalera que nos llevo hacia ahi y buscar otra distinta.

ser consciente de la irracionalidad ontológica que nos rodea, y desintegrarla. eso es la filosofía.

un abrazo jota..

Anónimo dijo...

"Ave Fenix: es un ave mitológica fabulosa que vivía en los desiertos de Arabia. Su aspecto era parecido al de una garza, del tamaño de un águila y tenía dos largas plumas a modo de cresta. Para los egipcios era como el símbolo de la inmortalidad y dios protector de los muertos debido a que tenía una estrecha relación con el renacimiento. Decían que tenía un color rojo y plumas de oro y en su honor le dedicaron un templo en Heliópolis que fue la ciudad sagrada del Fénix, donde volvía cada 500 años para morir y renacer, ya que este era su principal papel, renacer y crearse a sí mismo".
Lo recuerdo vagamente, pero lo recuerdo...poemas, relatos, decires que decían mucho. Todo funcionaba como una perfecta canalización de aquello que es tan necesario expulsar. Hoy los vuelvo a encontrar y el recuerdo se hace materia.
Los felicito por animarse a hacer estallar esas cenizas, por volver a darles forma, por renacer.
Un bravo para esta ave sin desierto ¡Un bravo para esta ave bien porteña!

Alejandra N. Santoro

lapsuscalami dijo...

Yo creo que tercer año fue el mejor año de mi vida... ahora, no sé si porque fue que descubrí a la primera persona que quise de otra forma, o si por estar sentado con diogo y con dos potencias adelante como mare y escarchota... o si fue por las reuniones de los viernes a la tarde entre meceditán, axolott, glaistig y al... esos de la sociedad anónima... gracias ale por leernos y recordarnos, lo de fénix está muy bueno, tal cual es así lo que belufiña habrá querido decir, gracias diogo por existir tanto